Autoestima y cirugía estética: recupera la confianza en ti

Autoestima y cirugía estética: recupera la confianza en ti

 

En Maxorl nos preocupamos por los deseos estéticos de nuestros pacientes y también por los resultados funcionales. Creemos en que además de lograr la apariencia deseada se resuelvan dificultades respiratorias u otros problemas de la nariz. Si necesitas contarnos tu caso para planificar una rinoplastia, estaremos encantados de escucharte. 

La autoestima y la cirugía estética están muy relacionadas. Hacer cambios estéticos puede ayudarte a recuperar la confianza en ti. Y es que, la rinoseptoplastia es una cirugía que se realiza para mejorar la apariencia de la nariz y resolver cualquier problema funcional que se diagnostique. 

Modificar el tamaño, forma y estructura y crear armonía estética puede tener un impacto significativo en la autoestima de una persona.

Tendencias en la sociedad

Actualmente la cirugía o tratamientos estéticos ha aumentado su popularidad. Y está relacionados con la búsqueda de un estándar de belleza perfecto por diferentes motivos: presión o influencia social. En concreto el grupo de población más afectado es el de edades comprendidas entre 18 y 50 años. 

La importancia de una buena autoestima en la adolescencia, los estándares de belleza y reconocer defectos estéticos muy notorios afecta a lo que pensamos de nosotros mismos. Es cierto que las motivaciones para realizarse una intervención estética deben ser claras para no caer en inconformidades, pero también es necesario entenderlas para que el desarrollo de la personalidad no se vea afectado por un complejo estético. 

La autoestima nos define como seres humanos. Es la confianza que una persona tiene en sí misma y en su capacidad para lograr sus metas. La autoestima también se refiere a la forma en que una persona se ve a sí misma, puede afectar la forma en que una persona se relaciona con los demás, su desempeño en el trabajo y su vida en general.

Hay varios estudios que demuestran el impacto de las cirugías estéticas como la rinoplastia en el nivel de autoestima del paciente, ésta se puede mejorar en más del 70 % de los casos. Los pacientes refieren un aumento en la autoconfianza, lo que es un factor muy importante en ciertos sectores como el laboral, sobre todo en profesiones con mucho contacto social o de cara al público.

Cómo no dañar la autoestima con cirugía estética

  1. Con una buena planificación: esperar un resultado no significa que pueda obtenerse. Es importante analizar cada detalle de la nariz y ser realistas con lo que se puede lograr. Nuestra simulación virtual ayuda precisamente a esto. Por tanto, nuestros pacientes saben su resultado antes de someterse por lo que no se generan expectativas erróneas y realmente conseguirán sus deseos estéticos y podrán verse bien y solventar ese complejo.
  2. Corrección de anomalía físicas: además de querer una determinada estética, el hecho de corregir desviaciones o defectos muy evidentes sería suficiente para que aumente el aprecio por nosotros mismos. Y es que ya no se trata de querer imitar un estándar de belleza sino de corregir eso que tanto nos afecta. 
  3. Teniendo consciencia de la realidad. Como hemos dicho antes, la cirugía estética corrige o crea un aspecto que deseamos. Sin embargo debemos ser conscientes de que la autoestima se compone de muchos factores. Analizar el verdadero problema y valorar si ese cambio estético sería suficiente es importante. Podríamos caer en dependencias estéticas cada vez que nuestro aprecio a nosotros mismos caiga. 

En Maxorl nos preocupamos por los deseos estéticos de nuestros pacientes y también por los resultados funcionales. Creemos en que además de lograr la apariencia deseada se resuelvan dificultades respiratorias u otros problemas de la nariz. Si necesitas contarnos tu caso para planificar una rinoplastia, estaremos encantados de escucharte. 

Para evitar complicaciones en una rinoplastia es importante realizar un exhaustivo y acertado examen preoperatorio. Por norma, suele ir bien. Sin embargo no podemos olvidar que estamos realizando una intervención y que pueden surgir dificultades aunque se haya previsto.

Hoy vamos a conocer qué posibles complicaciones  podemos encontrarnos durante una rinoplastia.

Una operación compleja pero conservadora

La rinoplastia y rinoseptoplastia constituye para muchos cirujanos la intervención más difícil de la esfera facial. Exige un conocimiento amplio de la anatomía tridimensional de la nariz, así como el manejo de una serie de refinamientos técnicos que nos permitan resolver los retos que nos plantea cada intervención. Nosotros hemos de tener siempre presente que además de conseguir un resultado estético adecuado, debemos garantizar una correcta función nasal

Como decimos, damos mucha importancia a ese estudio previo antes de operar. El objetivo de éste debe ser verificar las deformidades presentes y las características de la piel nasal y planificar la intervención que vamos a realizar (vía de abordaje y técnicas a emplear). 

Desafortunadamente y como en toda intervención quirúrgica, pueden aparecer complicaciones por factores varios. Por suerte cuando aparecen en la mayoría de los caso son pasajeras y de fácil resolución. Sin embargo muchas de estas complicaciones son molestias transitorias que se resuelven de manera natural en el proceso de curación.

Posibles complicaciones en una rinoplastia

  1. Infección: no suele ocurrir con frecuencia. Pero si aparece, lo habitual es que se infecte la zona de la incisión o el área del tabique nasal y senos paranasales (rinosinusitis). Para prevenir, recomendamos curar a diario la zona de incisión y si fuera necesario, tratamiento antibiótico profiláctico y lavados  nasales.
  2. Sangrado: se puede producir sangrado durante la cirugía y en el postoperatorio inmediato. Normalmente basta con un taponamiento que retiraremos en un par de días y que controlará ese sangrado. Muy excepcionalmente se requieren otras medidas porque el sangrado sea más abundante o duradero, pero insistimos que es escaso.
  3. Dolor:  tal y como hemos comentado en otras ocasiones, la rinoplastia no es una cirugía dolorosa. Aunque en el  postoperatorio pueden aparecer cefaleas o dolor facial que desaparece con la medicación adecuada. 
  4. Edema facial. Las técnicas actuales, tal y como hemos dicho en otras  ocasiones, disminuyen mucho el edema. En definitiva no podemos decir  que esto sea una complicación si no  más bien parte del proceso de curación. Lo normal es que desaparezcan en las primeras semanas. 
  5. Hematomas. Al igual que los edemas, con nuestras técnicas de rinoplastia la aparición de hematomas es mínima. Sin embargo, hay algunos factores externos que podrían favorecer la aparición de hematomas ya  sea por alteración de coagulación o fragilidad capilar que en ocasiones desconocemos.  Por suerte, esta situación es poco frecuente y no interviene en el resultado final de la cirugía. Los hematomas se curan de forma natural en la primera semana. Por eso insistimos en la importancia del seguimiento del cirujano, para controlar este tipo de consecuencias y tomar medidas rápidamente. 
  6. Problemas de cicatrización. No suele ser lo habitual puesto que las técnicas de rinoplastia son conservadoras y precisamente evitan las cicatrices. Pero existe la posibilidad de que en algunos casos aparezcan cicatrices gruesas o queloideas en la piel alrededor de la incisión. Otra posibilidad son  las sinequias (bridas cicatrizantes dentro de la nariz) que dificultan la respiración a largo plazo. Cualquier dificultad  se solventa con procedimientos adicionales del cirujano pero sobre todo, el cuidado postoperatorio es  la mejor forma de prevenir.
  7. Asimetría nasal:  puede observarse una asimetría en la nariz tras  la cirugía pero se trata de pequeños  defectos que en la mayoría de los casos desparecen  con el tiempo. Recordemos que hasta que no pasen seis meses no daremos por completada la recuperación  y que en ese tiempo podrían aparecer fenómenos  fibrosis edematosos y cicatrizantes tardíos que condicionen los resultados. Aunque insistimos, que el  estudio preoperatorio y la elección de la técnica adecuada evita todo esto. 

El resultado final de la rinoplastia es la suma de varios factores factores: técnica quirúrgica + evaluación preoperatoria + cuidados postoperatorios + antecedentes previos + tipo de cicatrización + tipo de piel. Todos ellos particulares y diferentes en cada paciente.

8. Problemas respiratorios. En las primeras semanas cuando la nariz se congestiona pueden aparecer problemas respiratorios. Sin embargo puede ser parte del proceso cicatrización. Por eso son tan importantes las revisiones periódicas tras la cirugía. Sobre  todo en pacientes alérgicos, con patologías  rinosinusal previa o antecedentes otorrinolaringológicos previos podrían sufrir estas consecuencias con mayor intensidad.Casi siempre con tiempo y el tratamiento adecuado desaparecen.


Nos gustaría aclarar que estas son las complicaciones que podrían aparecer,  pero es evidente  que dependiendo de cada persona puede darse con más  gravedad o menos. Sin embargo, como hemos contado durante todo el artículo gracias al diagnóstico y estudio antes de la cirugía, en Maxorl contemplamos posibles consecuencias y trabajamos para evitarlas. 

Si tienes alguna duda o necesitas que te veamos, puedes contactar con nosotros y cerrar una visita gratuita, ¡te esperamos!

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